Ayuda a reducir el riesgo de chocar con el vehículo de adelante. Este sistema detecta, gracias a una cámara y un radar, que circulan más lento o se encuentran adelante. Está diseñado para operar tanto en ciudad como en carretera.

Analiza el espacio entre vehículos y clasifica el riesgo de tener una colisión. Si el riesgo es alto y no hay espacio suficiente para evitar la colisión solamente frenando, el sistema ayuda al conductor a librar el obstáculo con el volante.

Da el nivel de torque suficiente para esquivar el obstáculo. Aplica los frenos de cada llanta de manera independiente para mejorar el trazo del giro.